miércoles, 16 de febrero de 2011

De la fauna y la flora

Me ha costado meses entender el funcionamiento del pueblo y de sus distintos grupos, no es que ahora sea un profesional en esto pero ya, más o menos, creo que puedo identificar distintos grupos. A veces me parece que en este pequeño pueblo se podría retratar una imagen muy fiel del perfil de grupos en los que se compone el mundo.
La fauna y la flora de San Pedro da mucho juego para estos análisis. Aquí mi clasificación.

Los hippies están pá allá, no ven más allá de mañana y planear cualquier aventura les puede llevar todo un día pero luego nunca se cumple. Tienen una vida rara, una forma de pensar, desde mi punto de vista, egoísta. Son una especie en extinción, nada les parece bien del todo, para todo tienen una crítica. Siempre se pude protestar, es gratis, aunque para ellos hasta los impuestos son gratis. En el pequeño retrato del mundo serían los famosos tocacojones, los que jamás han hecho nada por nadie más que por ellos mismos y se quejan de la falta de solidaridad de los demás. Los que creen en las conspiraciones, a los que la sociedad siempre les jode, los que quieren dar pena, los tristes, al fin y al cabo. Hay que tener cuidado, son difíciles de identificar; al principio, nos embaucan con sus ideas y su estilo de vida. En esta clasificación entran los pihippies y alternativos varios.

Los currantes de toda la vida, chapines, españoles o de donde sean, miran demasiado al mañana y por ello no les preocupan sus vacaciones ni sus horas de trabajo. Obviamente, aquí sólo hay chapines currantes. Lo importante es progresar, tener opciones, avanzar y avanzar. El precio lo tienen asumido: jornadas laborales largas, al salir a regentar el negocio familiar y el sábado a la universidad, porque aquí no se deja nunca de estudiar. También tiene una vida rara. Me pregunto: ¿qué van a hacer con el dinero que amasan? ¿sus hijos serán como ellos o se acomodarán en las ganancias de sus padres? ¿Nunca han pensado irte una semana de vacaciones? Y se amontonan las preguntas. Estos son los que suelen estar muy orgullosos de si mismos, de su trabajo y desdeñan a los que sufren a los que no consiguieron salir adelante. Los que alardean de cada adquisición y quieren tener siempre más que el vecino. Resumiendo, la clase media alta, los nuevos ricos, los que piensan que si se sufre es porque no se ha trabajado demasiado. Los neoconservadores que no son millonarios pero defienden a los millonarios. Los millones de personas que votan a Berlusconi

Los que están realmente jodidos son los que a las cuatro de la mañana ya salen a trabajar el campo, normalmente andando. Antes, cuando se podía salir de copas, te los cruzabas y nunca sonreían. El camino al trabajo debe ser como una penitencia diaria de, intuyo, al menos, una hora. A eso de las tres de la tarde vuelven a casa cargando leña sobre la espalda; el gas es muy caro y no todos se lo pueden permitir. Cargan leña a la espalda y lo atan con un cordel que rodea su frente. Como animales de carga, encorvados, arrastran los pies hasta la casa; si el día fue bien paran en una cantina, si el día fue muy mal también paran en una cantina. Más que una vida rara tienen una vida jodida. Son en su mayoría hombres, sus mujeres también trabajan y muy duro. Es más que probable que se levanten antes que ellos y les preparen el desayuno, luego salgan a vender al mercado y se pasen la tarde cosiendo para aumentar los ingresos familiares; mientras cuidan y educan a los niños y aguantan borracheras un par de días por semana. Los hombres serían como los chinos oprimidos y uniformados trabajando en talleres todas las horas del día y de la noche. Las mujeres son África.

Los empresarios de aquí se dividen en terratenientes y dueños de hoteles o pequeñas empresas de servicios. Son pequeños empresarios venidos a más que luchan por no pagar impuestos y que acaban metidos en política. Bien presentándose a las elecciones bien financiando al candidato que creen que ganará, ni siquiera en el que creen. Un amigo me dice que es otra forma de pagar impuestos…No creo que haga falta explicación de a quién representan en mi mundo.

Por último, el turista. Mayoritariamente joven y mochilero. Muchos vienen a emular a los hippies por unas semanas, otros solo viajan y paran por aquí por sus paisajes y su cultura. Es una forma cínica de llamar a la pobreza. Mira como van los que están realmente jodidos al campo, cuánto peso cargan en su espalda. Has visto a las seños cosiendo de rodillas en su casa, etc. El turista es la ONU: mira lo que pasa, deja unos cuantos euros, se siente bien y lo cuenta a su vuelta como una aventurilla

3 comentarios:

  1. Y diu yo. ¿Tu en que grupo estas?(raro es que esta pregunta no haya caido hasta ahora....)

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  2. No lo has entendido, todos estos grupos son la fauna, yo soy la flora jejeje

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